7 feb 2008

A Julieta...

Nuestro mundo de personas y personajes se divide en dos submundos.
Tales laberintos, conducen a pasadizos completamente distintos.
Cuando se unen estos caminos, en realidad son puentes fantasmas. Es inevitable tener que convivir en esta ciudad recargada por un capitalismo salvaje.
Dichos submundos son: el normal, que ya por definición pierde todo tipo de interés, y el artístico.
Cómo no poner pasión en el círculo artístico.
Las personas nacemos, nos vinculamos emocionalmente y vamos modelando nuestra personalidad.
La personalidad, esconde la esencia deseada y las ideas soñadas para que se eleven en el inconsciente del entorno o campo al que aspiramos posicionar.
Recién (tuve que dejar pasar acosadores minutos para relajar mi pluma) gocé increíblemente con un episodio especial.
Volví a reencontrarme con una mujer con tanto arte incorporado que bastaba mirarla para sentir su intensidad…
Su mirada es infinita en interpretaciones. No caben dudas que esos ojos de romántica cazadora, acorralan a cualquier presa.
Cuando me doy el lujo de conectarme con personas de tal naturaleza artística, reafirmo que mi mundo, no el normal pero si el más desafiante, es el mejor camino.
Los artistas soñamos con una obra inmortal…y tomando de trampolín este pensamiento, es imposible no conquistar lo inconquistable…
M.L.Z.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

un sueño...

Tuky dijo...

"Volví a reencontrarme con una mujer con tanto arte incorporado que bastaba mirarla para sentir su intensidad…" eso es bello, muy bello